LA HORA DEL CUENTO

La “hora del cuento” es una experiencia cuyo fin es el disfrute y el placer de poder escuchar la narración del cuento. Desde el punto de vista social, caemos en la tentación de que la narración es para aquellos niños que todavía no saben leer, pero es todo lo contrario, es para todas las edades sin excepción alguna.
Por ese motivo, elegí mi nombre del blog “para todos los niños de 0 a 90 años” ya que todos aquellos libros, textos o cuentos tengan la posibilidad de ser contados, leídos o cantados por cualquier persona con el fin de disfrutar.
Como dice la definición, es un momento para trabajar en el aula y en casa con los cuentos y para despertar el interés de los niños por los libros y la lectura. Debemos de comprender tanto los maestros como los padres que la literatura infantil debe ser disfrutable por sí misma.
Sin embargo, la hora del cuento, no consiste sólo en la lectura en voz alta, sino que hay otras formas de transmisión literaria como por ejemplo la narración con libro y los cuentacuentos; los cuales favorecen la imaginación del niño y el narrador tienen un papel como agente socializador.

Para realizar esta actividad, el día 25 de abril de 2019, hicimos el taller de lectura, consistente en que cada uno de nosotros (de las tres personas por cada grupo) escogiera una estrategia de las tres que he  mencionado antes y la aplicamos en niños de infantil (de 0 a 6 años) en el aula, específicamente, en la hora del cuento.

En un primer momento, quería escoger el texto folclórico: Garbancito, puesto que lo había contado en las prácticas y también en la entrada anterior. Aunque en las practicas no lo conté como un cuentacuentos, si no que use las ilustraciones del cuento e hice interacciones con niños de 3-4 años.

Quiero hacer hincapié en que el cuento que utilicé en su día no era fiable por dos aspectos. El primero; como hemos visto mucho en clase, los libros llenos de cuentos no son fiables y en segundo lugar, no estaba recogido ni adaptado por ningún recopilador, para ser fiable.
Por ese motivo, opte por utilizar otra estrategia como la narración, ya que lo que quería en un primer momento, era contarlo e interactuar con los niños, ya que en mi opinión deben ser los protagonistas de la lectura o que se sientan integrados en el ámbito de la literatura infantil con el objetivo del disfrute como un hecho artístico de la promoción de la lectura.

He elegido esta forma de transmisión, porque creo que se puede asemejar a un cuentacuentos pero con un apoyo visual, es decir que mediante la narración se enseña ilustraciones o imágenes para que los niños capten la atención en ello y también, en la forma de gesticular a la hora de contarlo.

El cuento que escogí es el cuento de “Elmer” de David Mckee de la editorial Beascoa.



Imagen recogida de mí


La elección del cuento fue, ya que el último día antes del taller, Irune lo mencionó, me llamó la atención no solo por la manera de “mostrarlo” sino también por otros aspectos como por ejemplo los colores llamativos y la forma del elefante en la portada. En un primer momento, lo quería enfocar para niños de 3 a 4 años, ya que los niños se pueden identificar con el personaje principal “Elmer”. Sin embargo, cuando lo conté en el salón de actos, me di cuenta que el mejor periodo para contarlo es cuando los niños tienen capacidad de imaginación, creatividad e identificación con el protagonista.

Este periodo cumple los 5 - 6 años. ¿Por qué?  Principalmente porque al narrarlo es muy largo, y estos niños suelen mantener despierta su atención durante 20 minutos.  Otro de los factores que predomina este periodo es que les gusta las tramas alegres, con aventuras, con “algo” fantástico, los animales u objetos que cobran vida, ya que todavía no diferencia entre la fantasía y la realidad.  Este cuento tiene un personaje principal que es Elmer y después varios personajes secundarios (la familia, los animales), en este caso no habría ningún problema ya que les basta con dos personajes principales y otros secundarios.

Como dato curioso antes de empezar a redactar como lo he planteado y narrado, quiero hacer una pequeña referencia biográfica del escritor David Mckee:


David Mckee es un escritor de literatura infantil e ilustrador británico. El personaje más famoso y más exitoso es: “Elmer, el elefante a cuadros”, inspirado en la obra del pintor alemán, Paul Klee. El libro ilustrado fue publicado en Inglaterra en 1969 y fue desarrollado por el profesor alemán Hans-Georg Lenzen traducida de su propio idioma alemán.




La manera de cómo lo he planteado a la hora de como contarlo a los compañeros ha sido utilizando el libro y de ahí, contar el cuento con mis propias palabras pero respetando los puntos clave que hacen que tenga –viva- la historia del autor.

Aunque me hubiera gustado  no utilizar el libro, sino sacar las ilustraciones y ampliarlas a D-3 para que mis compañeros mantengan la atención en la imagen y no intenten leer las palabras o frases del cuento y además a introducirlos a que imaginen. 

En el ámbito docente, plantearía lo mismo junto con el mismo razonamiento utilizando el Kamishibai o un atril para así evitar el comentario del “No veo”. ¿Por qué de estos objetos?:
1             .      El Kamishibai “drama de papel”: en el que se inserta ilustraciones que se van removiendo a medida que se cuenta la historia. Esto, beneficia tanto al maestro, a la hora de contar o leer lo  y al niño para centrar la mayor  atención en la ilustración. 


2            .      El atril; cuyo uso es el mismo, donde se puede apoyar cuentos grandes o imágenes grandes. Este objeto lo lleve a las prácticas, fue un buen uso ya que a la hora de pasar las hojas es muy cómodo y también les enseñas cosas nuevas. Recuerdo que cuando lo enseñe, los niños me dijeron que era como un teatro.

Ahora redactaré como han sido mis tres intervenciones con mis compañeros de clase, la forma de narrarlo, las preguntas y las opiniones de ellos hacia mi forma de transmitirlo.

En la primera intervención, me tocó con los compañeros elegidos: Sandra García Agenjo y Mario Antón. La forma de la narración ha sido la siguiente: primero les he explicado la selección del libro y la edad preferente, y posteriormente he empezado a contarles el cuento “Elmer” junto con varias interacciones con ellos, que en un futuro lo haría con los niños de 5 años para así trabajar la decodificación gráfica icónica.
Empecé mostrándoles la portada del libro, diciendo:

Érase una vez, una familia de elefantes, todos eran muy diferentes, pero todos muy felices. Unos eran gordos, otros eran delgados, otros pequeños y otros muy grandes. Pero todos tenían algo en común, su bella piel (1ª interacción: ¿sabéis de qué color es la piel del elefante?_ Aquí, los niños seguramente me den varias opciones como blanco, rosa, marrón, gris, negro…) Como hay que reunir todas las ideas, lo que digo es: ¡vamos a mirar si estos elefantes tienen los mismos colores!

Abro el cuento en la segunda página:


Ah la, estos elefantes tienen el color gris. Unos son grandes (voy señalando) otros delgados, otros pequeños y otros gordos (dos ellos en la parte izquierda y otros dos en la parte derecha). En esta parte, me apoyo en los decorados, los detalles, lo describo…

Pero, (hui), puedo ver que hay un elefante que no es gris (2ª intervención ¿de qué color es este elefante?_ Aquí lo normal es que me contesten el color azul) si es de color azul, este elefante es diferente, se llama Elmer. ¡Vamos a ver que de distinto es…!




Elmer tiene muchos colores, tiene el color verde (lo voy señalando), el color azul, el color negro… pero (oh) no tiene el color del elefante, pero sí, tiene algo especial, y es que es muy gracioso, siempre hace reír a sus amigos, a su familia y ellos se ríen con él.


Pero un día esto no pasó, una noche, Elmer no podía dormir, estaba pensando y pensando… ¿por qué se ríen de mí? (ahí hago el protagonista). Él que estaba triste, se marchó de puntillas para que no se dieran cuenta. 


Empezó a caminar y a caminar hasta que entro en la selva donde habitaban unos animales, quienes le dijeron:

-           -   Buenos días, Elmer dijeron el león y el tigre.

-          -  Buenos días, Elmer dijo el hipo-po-tamo (lo hago con onomatopeya), eliminando la monotonía de la escucha y favoreciendo la comprensión por parte de los receptores.
-            -  Buenos días, Elmer dijo la jirafa (aquí gesticuló con la boca “la forma de cómo comen las hojas”).
-            -  Buenos días, dijo la cebra.
-            - Buenos días, dijo el cocodrilo (voz más grave) y dijo la tortuga (voy más suave).
(Aquí utilizo la narración dramatizada favoreciendo el juego simbólico, la identificación con los personajes y la comprensión de las acciones)
Elmer que estaba triste, dijo: buenos días (mientras que lo digo, muevo la mano de un lado para el otro como la trompa de un elefante). 



Caminó, caminó y caminó hasta que se encontró con un árbol de frutos grises. Entonces, pensó  y si sacudo el árbol para que caigan los frutos. (3ª Intervención: les diría de ayudar a Elmer a agitar el árbol, por eso nos sacudiremos juntos)


Cuando ya están los frutos en el suelo, Elmer que era muy listo se tumbó encima de ellos para así teñirse la piel del color gris. Cuando lo consiguió, quiso contárselo a su familia, por eso tuvo que pasar por donde los animalitos que le habían saludado antes… pero cuando llegó, uno le dijo: ¡buenos días, señor elefante!


Elmer sorprendido y a la vez contento dijo cantando ¡buenos días!, y se fue corriendo a contárselo a su familia cuando de repente se detuvo porque estaban todos dormidos…


Pasaron las horas (posteriormente a esta imagen hay dos, que las quitaría ya que si las quito la historia no se cambiaría) y seguían durmiendo cuando de repente a Elmer se le ocurrió gastar una broma y entoncesBUH,


Los elefantes al asustarse se dieron la vuelta…


y empezaron a reír, cuando una fuerte lluvia empezó a caer (hago el sonido de la lluvia). Elmer, se sintió triste otra vez, porque el color gris de su piel estaba desapareciendo. Pero uno de los elefantes dijo: esto hay que repetirlo ¡Haremos una fiesta!


Y así fue: los elefantes se disfrazaron de Elmer (de corazones, de círculos, de payaso, de arcoíris (siempre señalando)), bailaron, cantaron, tocaron música y Elmer se disfrazó del color del elefante.


Y colorín colorado este cuento se ha acabado.

Las preguntas que les plantearía a los niños:

-          ¿Os ha gustado?
-          ¿Qué es lo que más os ha gustado del cuento?
-          ¿Qué personaje os gusta más?
-          ¿Harías lo mismo que Elmer, cuando agita el árbol?
-          ¿Cambiarías algo del cuento?

También, les he hecho preguntas a mis compañeros para así mejorar.
-          ¿Creéis que debería cambiar alguna expresión o algún tono?
-          ¿Creéis que este cuento está adaptado para los tres o cuatro años? (hago hincapié a lo que he dicho antes, yo lo había pensado para los tres- cuatro años pero cuando he hecho la segunda intervención con Patricia Abril me ha dicho que por ser un cuento largo es mejor que cambie la edad)
v  Aspectos positivos:
-          Elevar y bajar la voz cuando se diese la situación, al igual que dar ímpetu a alguna sorpresa.
-          He pasado las hojas mientras que lo iba contando y me ido anticipando a lo que venía.

En la segunda intervención, me toco con Patricia Abril; quien me recomendó que tuviera en cuenta que al ser un cuento largo se debería de contar a niños más grandes que de tres años. También otros de los aspectos que me ha dicho es que utilice más las ilustraciones para señalarlas y además, hacer el cuento más corto. Y por último, en la tercera intervención, estuve con Sara Pérez González y Paula Díez Lobo quienes no me dijeron concretamente los aspectos positivos y negativos, sino que les gusto como lo había transmitido.

Mis sensaciones han ido evolucionando, ya que al principio estaba nerviosa pero cuando he ido narrando la historia me he ido sintiendo cada vez mejor, al igual que en las siguientes con las otras compañeras que han sido amenas y gratificantes.

Conclusión:
Como conclusión, decir que aunque ya he plasmado en la trama de la actividad varias argumentaciones sobre mi perspectiva docente, este tipo de actividad me ha encantado no solo porque a la hora de ser maestra tienes que contar, leer o cantar cuentos, sino que también con este ejercicio practicas tus expresiones, tonos, gestos e ideas con otras personas que van a dedicarse a lo mismo. Por ese motivo, de alguna manera tú mejoras y a la vez aprendes con otros.

Desde mi punto de vista durante la práctica, hay momentos que me ha dado pena porque tenemos una gran oportunidad para saber cuáles son nuestras capacidades, nuestros fallos o algún factor que nos cuesta más, y en realidad no lo aprovechamos como lo deberíamos hacerlo.
Pero, en mi caso, he aprovechado bastante esta actividad  aunque no me haya dado tiempo a contar más de tres veces mi cuento, pero de esas tres me he sentido a gusto y cómoda como ya he dicho y aparte he aprendido que durante  el recorrido  que lo vas contando, te esfuerzas para no cometer el mismo error que en la primera vez.

Por otra parte, gracias a los conocimientos que he adquirido durante el año por ejemplo la diferencia de la  literatura y la para- literatura, los libros, cuentos y textos folclóricos y las formas de transmisión literaria me ha ayudado a poder seleccionar el cuento y en este caso que cuento para que estrategia.

Como ya he dicho, es importante que cuando vayamos a las prácticas tengamos en cuenta que cuento vamos a transmitir a los niños y que la literatura es fundamental propiciarla tanto a nivel educativo, social y familiar. Por tanto, hay que hacerles comprender y ver a la familia que la hora del cuento para dormir o un rato en casa es beneficioso para  que sus hijos entiendan y disfruten de ella aparte de tener un vínculo más afectivo entre ellos.

Bibliografía







Comentarios

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  2. Hola CRIS !!

    Bueno, primero decirte que me ha gustado mucho tu introducción al tema de este bloque 3, creo que le has dedicado tiempo y esto se nota.
    Además, pienso que es acertada tu cambio de edad a la que va dirigida este cuento por las razones que nos das, aunque como ya sabemos este cuento creo que valdría para el segundo ciclo de infantil pero como tu dices mejor para la edad 5-6 años.
    Creo que la manera en que nos presentas tu actividad de vivir el cuento como lo hizo o haría el autor es una gran idea porque así le podemos dar mucha más importancia.
    En cuanto a la preparación y desarrollo de la actividad en el taller y en el blog, opino ha sido muy satisfactoria para ti, pues se nota que lo has hecho con ganas y que te has esforzado por obtener este buen trabajo.
    Por ello, te felicito y te animo a seguir así.
    Sólo aconsejarte que podrías poner en las imágenes de que fuente las has sacado, como has hecho en la portada del cuento de Elmer.

    un beso !

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    1. Muchas gracias por haberte leído mi análisis de este bloque, gracias por tu manera de dirigirte a mi, Muchas gracias por tus felicitaciones. Y sobre lo de las fotos, no lo puse de donde está recogida , puesto que son todas mías, entonces no se si dejarlo así ya que son mías o en cada una poner que es mía. En el caso de la biografía del autor, es verdad que he puesto el enlace .
      Yo creo que lo voy a dejar así ya que en los anteriores trabajos también lo he puesto así.
      MUCHAS GRACIAS DE NUEVO
      UN BESO

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